Brunch -In the Park desborda sus propias expectativas en Madrid

El pasado domingo 18 de septiembre se celebró en el Parque Enrique Tierno Galván la edición madrileña de Brunch -In the Park, después de los éxitos cosechados por los organizadores en las ciudades de Barcelona y Lisboa. El público madrileño recibió con entusiasmo la propuesta y desbordó las propias expectativas de los organizadores, que se quedaron escasos tanto en el servicio de baños, como en barras. Esto provocó grandes colas que llegaron a alargarse hasta 45 minutos. Al finalizar su primera edición tras del set de John Talabot, los organizadores se disculparon a través de la megafonía prometiendo grandes mejoras en las tres próximas jornadas. Reconocer los errores es de sabios y esta gente sabe muy bien lo que hace.

Ciñéndonos ya en los estrictamente musical, comenzamos la jornada un poco tarde ya que la posibilidad de aparcar en la zona es hartamente complicada. Llegamos con el set de Barnt recién empezado, quien estaba pinchando un house tranquilo y pegadizo que se complementaba con éxito para lo hora que era. La pista no estaba del todo llena aunque ya se notaba una alta afluencia de público, muchos refugiados en las pocas zonas de sombra habilitadas, huyendo de los rayos del Sol que pegaban fuertemente. A medida que transcurría la tarde, el alemán comenzaba a dar más fuerza a sus ritmos, entremezclándolos con sonidos más eléctricos y duros, lo que empezó a mover mucho más al personal. Ya finalizando su sesión, soltó uno de sus temas más conocidos que volvió loco al personal, Barnt – Geffen (Original Mix).

Para finalizar la primera jornada de Brunch -in the Park, el grandísimo John Talabot se marcó una sesión antológica controlando el tempo y ritmo en todo momento. Este hombre tiene la capacidad de ralentizar el tiempo a su antojo. Cogiendo el testigo de Barnt, empezó la sesión con ritmos moviditos que hicieron las delicias del público. Con la bajada del Sol la pista ya estaba totalmente abarrotada y no cabía ni un alfiler. El capo de Hivern Discs muy concentrado en todo momento, jugaba con una selección de tracks marca de la casa, completando una sesión muy dinámica y, sobre todo, divertida. El punto álgido de su sesión, fue cuando pincho Underworld – Born Slippy, un clásico de toda una generación, que el catalán utilizo para detener el tiempo, pinchándola a un ritmo muy lento que a mi personalmente me encanto.

Aún quedan otros tres domingos consecutivos para poder disfrutar de esta fiesta en Madrid. Hablamos de nombres como Apollonia, Terence Terry, Octave One, Moodyman o Tiga. Estamos expectantes porque seguro que la organización no defraudará a un público que ha recibido con los brazos abiertos a este tipo de propuestas en la capital después de años demandándolas.