El dúo sevillano presenta su último trabajo “Honey”, esta vez bajo sello propio. Un disco de 8 cortes y 31 minutos de duración en el que queda plasmado el cuidado artesanal de todos los detalles de este lanzamiento.
En una superficie musical donde los artistas se entregan cada vez más al cultivo intensivo de la automatización compositiva, existen terrenos alejados donde crece el talento de forma libre, natural y espontánea. Este es el caso de Benjamín Jiménez y Myriam Fernández, componentes del grupo BeatLove que con su nuevo trabajo logran sintetizar un disco con elementos tan agradables al gusto como el azúcar. De eso está lleno este “Honey”, cuya construcción sonora y compositiva parezca hecha con la perfección geométrica de ocho paneles prismáticos hexagonales diferentes.
No es de extrañar que los autores de este disco hayan sido consultados por varios de los medios especializados más prestigiosos del país, granjeándose la fama de artesanos de la electrónica por lo cuidado de sus productos. “Honey” no es una excepción, y tanto en lo relativo a lo musical como al apartado de diseño, se puede distinguir una clara denominación de origen.
Pero para poder conocer mejor algunos de los ingredientes que componen este producto, hemos hablado con quienes mejor lo conocen, sus productores.
Muchos DJ suelen decir que normalmente tienen alrededor un segundo para detectar si el sonido de un disco es lo suficientemente bueno como para seguir escuchándolo. Honey es uno de esos discos que capta la atención en centésimas de segundo. ¿Cómo habéis logrado un sonido tan compacto y llamativo?
Lo primero muchas gracias por haber llamado tu atención. Con este disco queríamos temas que se pudieran disfrutar y que te pudieras sumergir de lleno en cada uno. Hemos jugado mucho con las voces y hemos disfrutado mucho durante el proceso.
He visto en vuestro set-up cosas como el Nord Rack B, Nord Drum 2, Elektron Octatrack, Roland SP 404, un par de Electribes, el Korg Monologue… ¿Cuál creéis que es el Hardware incluido en este disco que pensáis ha marcado la diferencia?
Sobre todo utilizamos mucho el nord rack para los sonidos polifónicos. En este disco también hemos incluido secuencias del semimodular moog mother 32.
¿Qué micrófono habéis utilizado para las partes vocales de temas como Lo-fi?
Generalmente grabamos las voces con el mismo micrófono que usamos en directo. Va muy bien para cosas rápidas. En el tema Lo-Fi primero se grabaron los versos y luego con Ableton Live se cortaron múltiples muestras para crear la parte secundaria de voces a modo de samples, cosa que después en muy sencillo llevar al live gracias a Octatrack.
En cuanto al software, ¿Habéis seguido utilizando Ableton como vuestra estación de trabajo? ¿Qué otro software o plugins podemos encontrar en Honey que consideréis importantes?
Sí, sigue siendo muy útil para estructurar los temas, incluso realizar cambios de baterías, sintetizadores, duración de la intro, etc. La verdad que no utilizamos muchos plugins externos a Ableton, pero en este disco sobre todo hemos utilizado Dexed.
En anteriores entrevistas os escuchábamos hablar del enfoque hacia el directo que tenían vuestras producciones y de los diferentes reworks en los que trabajabais con vuestros temas. ¿Ha sido diferente el enfoque de este Honey? ¿Qué principales diferencias veis desde el punto de vista de la composición con respecto a vuestros anteriores trabajos?
Hemos querido seguir la misma dinámica que con el anterior trabajo, haber conseguido un set estable para el directo por lo que también te acomodas,en el buen sentido de la palabra en las composiciones, como si de una banda con sus mismos instrumentos se tratase.
Pobla Studios vuelve a hacer la masterización de este disco tras haber participado en los anteriores. ¿Cómo ha sido el proceso de masterización de Honey?
Pues muy similar a los dos anteriores trabajos. Con ellos se trabaja muy bien, y la comunicación muy fluida. Al ser un trabajo en el que no estábamos presentes, puede haber cambios una vez escuchado de vuelta, que no ha sido el caso. Una vez que tenemos nosotros los temas finalizados, cogemos papel y lápiz y nos escuchamos el disco mil veces en distintos altavoces o auriculares.
Sin embargo de la parte del arte se ha encargado esta vez Manji Fernández. ¿Qué nos podéis contar acerca del diseño de arte del disco?
Ya lo conocíamos desde hace mucho, ya que es de nuestra misma localidad. Le seguíamos la pista desde hace tiempo con sus últimos trabajos realizados y pensamos que podría realizar una buena obra para la portada, la verdad es que acertó de pleno. Solo le dimos las canciones para que las disfrutara durante el proceso y totalmente libertad, sabíamos que quedaríamos muy satisfechos.
Además de cantar y componer, hemos visto a Myriam implicada en otras labores de dibujo y diseño. ¿Cómo gestionáis el apartado gráfico y de arte de BeatLove?
Los dos tenemos aficiones fuera de la música, Myriam realiza trabajos de resina, serigrafía y sellos, Benjamín es más el que hace el dibujo y el diseño, es más, para este disco que podréis encontrar por nuestro Bandcamp hemos hecho unas bolsas con serigrafía stencil todo a mano en casa.